LECTURA DE LAS ESTRELLAS
El próximo 1 de Julio, se produce el tercer eclipse de la saga de tres. El más espectacular ha sido el eclipse de Luna del pasado 16 de Junio, pero, al tratarse de una tríada, el poder está en su concatenación. Es decir, en su relación.
Normalmente se producen dos eclipses cada seis meses, uno de Sol y otro de Luna. Cuando uno de esos eclipses es tan exacto como lo fue el de Luna pasado, ocurre que hay tres, uno central muy exacto y dos más alejados, al límite, que lo acompañan.
Este nuevo eclipse se dará en el grado 15, 58 minutos de Géminis Sideral, siguiendo la escuela de Jiddu KRISHNAMURTI, (astrología védica) en Luna Nueva, ya que es un eclipse de Sol.
Como digo, es bastante lejano, pero la unión de estos tres eclipses está en que se unen en una misma fuerza, ya que los tres se encadenan en su manifestación.
Este tipo de eclipse, triple, no se da desde hace once años y tardará otros tantos en producirse de nuevo.
Si bien se han producido los cambios ya como consecuencia de las energías de los eclipses anteriores, sobre todo del segundo, éstos pueden tardar en ser manifiestos para la mayoría y, es cuestión de tiempo, el que sean conocidos por el común.
Cuando lo sean, probablemente conoceremos también que éstos se materializaron con anterioridad.
Un nuevo empuje a su expresión puede darse en esta fecha del día 1 de Julio.
La Luna Nueva suele afectar al mes completo, pero también es usual que ese mismo día, o en días contiguos algún suceso trasciende. Pese a que sea pequeño, atención a lo que sucede alrededor del día del eclipse: marcará una serie de conocimientos nuevos posteriores.
Esto es aplicable a nivel personal y transpersonal, como todas las energías astrológicas.
Estudiemos este eclipse:
La Luna y el Sol conjuntos en Géminis, se oponen a Plutón: no puede haber otro aspecto mejor para hacer que lo que está oculto se revele. El Sol y la Luna en Géminis son sinónimo de comunicación del Ser (SOL), llevado a este plano (LUNA). Sol en Géminis, bien expresado se relaciona con el “mensajero de los dioses”. Plutón representa múltiples energías, entre ellas el poder de lo que está oculto, también la sombra y la muerte... digamos que ha llegado el momento de revelar nuestras "sombras" personales y sociales.
Lo que toca Plutón, muere para nacer de nuevo, con otra “forma”, especialmente si es en un aspecto en tensión, como éste.
Para fluir con esta energía haríamos bien en poner nuestra voluntad en intentar ser conscientes de lo que hay escondido en nosotros y en los demás y más allá, con la finalidad de transcenderlo. Ése es el verdadero poder de Plutón: no hay otro camino a la luz que trascender la sombra, y, aunque aparentemente "sucio" y desagradable en principio, nada es más revelador y poderoso que hacer frente a nuestros propios miedos. Si lo hacemos, descubriremos que el único poder que los mantiene ahí somos nosotros mismos. Por sí, aquello a lo que tememos no tiene substancialidad, no es NADA.
Este aspecto está más reforzado aún: Saturno y Urano configuran una enorme CRUZ CÓSMICA, con PLUTÓN, La LUNA y el SOL...
Saturno y Plutón (el Padre del Karma y el dios de la Muerte) marcan etapas kármicas, por así decirlo (las palabras siempre son imprecisas, pero en alguna limitación debemos de caer si queremos expresarnos con ellas).
Digamos que son etapas que nuestro ser superior ha “planeado” con algún fin y que, por tal motivo, son especialmente significativas en algún aspecto. Pues bien, estos aspectos en tensión entre estos dos planetas marcan también, “curioso” las crisis económicas. En ellas los valores se “revisan”, como en la actual crisis que nos ocupa. Esta crisis económica trae consigo un significado más profundo: no ya el tema económico, sino el de verdad, causa de ésta: los valores de esta sociedad están desfasados, necesitan una urgente revisión y reprogramación desde sus mismos cimientos.
El aspecto Saturno-Plutón se está alejando. Este eclipse marca el comienzo de un final de etapa a este respecto. A partir de ahora la crisis se verá de “otra forma”… pero ¿cómo es posible si estamos sumergidos en ella de pleno? El cielo nos responderá, ya que, astrológicamente, la crisis comenzará a disminuir desde este eclipse y a partir de este otoño el aspecto se desconfigura…¿salimos de ella?
Urano unido a la configuración da un suceso repentino, sorpresas, verdades que no nos esperamos, que nos sobresaltan, inesperadas y evidentes, la VERDAD nos salta a la cara. En principio nos desestabiliza, pero es INNEGABLE…. Todo se “confabula” para que la verdad se muestre: La LUZ ES IMPARABLE.
Con estas energías, a poco que lo intentemos, lo "oculto", "la sombra", saldrá a la superficie. A algunos, pese a ellos mismos y ahí es donde puede producirse el mayor dolor, en la medida en que nos resistamos mentalmente a lo que deseamos inconscientemente, YA.
Para aquellos que sean afectados por este eclipse en algún planeta personal, los cambios serán radicales y poderosos también a nivel personal.
Venus, a principios de Géminis y en unión al nodo Sur, nos indica una reunión de antiguas energías de amor. Venus representa el amor, lo que consideramos valioso, la economía, en un plano material. Se van a dar conocimientos (Géminis) y nuevos encuentros de almas que están unidas por los lazos del amor en este mes y alrededor de esa fecha. Puede que volvamos a “valores” antiguos, quizá también económicos.
Esta energía se puede materializar en cualquier cosa que, para nosotros represente Venus y que merezca un cambio: puede ser un reencuentro con una antigua pareja, una antigua amistad, entre personas, entre colectividades.... También se puede dar en otro significado de “kármico”: no de esta vida.
Marte, en caída en Tauro nos avisa de que no es el momento de ser arriesgado. Todo viene tranquilo. Si bien, con el trino a Saturno (aspecto más armónico) nos dice que viene despacio (Tauro), pero seguro (Saturno). Saturno densifica y trae a este plano las energías que están en Marte. También Marte en Tauro puede representar a las energías o el poder (Marte) del Amor (Tauro, cuyo regente es Venus) o de la Madre Tierra, (otro arquetipo de Tauro). En Tauro la energía se condensa, espera su momento, y va ganado fuerza con el tiempo.
Es el momento de grandes acontecimientos, pero, los que están por llegar se harán de forma muy pausada, revisando y comprobando que son "bien recibidos"...con cuidado y sopesando su “momento”. Eso no evitará sorpresas y acontecimientos repentinos puntuales por la energía uraniana.
Hermanos, con el eclipse del 16 de Junio, en que la Luna se dejó de percibir, y estos aspectos de los que estamos hablando ahora, se aproximan cambios que marcarán una reconfiguración nueva de nuestra realidad: La LUNA es el arquetipo de la forma, de esta Vida. Ella dejó de percibirse por un tiempo (impresionantemente largo) para aparecer ante nuestros ojos con una forma que no conocíamos… ¿hay mejor imagen para lo que viene?
María Ángeles García
El próximo 1 de Julio, se produce el tercer eclipse de la saga de tres. El más espectacular ha sido el eclipse de Luna del pasado 16 de Junio, pero, al tratarse de una tríada, el poder está en su concatenación. Es decir, en su relación.
Normalmente se producen dos eclipses cada seis meses, uno de Sol y otro de Luna. Cuando uno de esos eclipses es tan exacto como lo fue el de Luna pasado, ocurre que hay tres, uno central muy exacto y dos más alejados, al límite, que lo acompañan.
Este nuevo eclipse se dará en el grado 15, 58 minutos de Géminis Sideral, siguiendo la escuela de Jiddu KRISHNAMURTI, (astrología védica) en Luna Nueva, ya que es un eclipse de Sol.
Como digo, es bastante lejano, pero la unión de estos tres eclipses está en que se unen en una misma fuerza, ya que los tres se encadenan en su manifestación.
Este tipo de eclipse, triple, no se da desde hace once años y tardará otros tantos en producirse de nuevo.
Si bien se han producido los cambios ya como consecuencia de las energías de los eclipses anteriores, sobre todo del segundo, éstos pueden tardar en ser manifiestos para la mayoría y, es cuestión de tiempo, el que sean conocidos por el común.
Cuando lo sean, probablemente conoceremos también que éstos se materializaron con anterioridad.
Un nuevo empuje a su expresión puede darse en esta fecha del día 1 de Julio.
La Luna Nueva suele afectar al mes completo, pero también es usual que ese mismo día, o en días contiguos algún suceso trasciende. Pese a que sea pequeño, atención a lo que sucede alrededor del día del eclipse: marcará una serie de conocimientos nuevos posteriores.
Esto es aplicable a nivel personal y transpersonal, como todas las energías astrológicas.
Estudiemos este eclipse:
La Luna y el Sol conjuntos en Géminis, se oponen a Plutón: no puede haber otro aspecto mejor para hacer que lo que está oculto se revele. El Sol y la Luna en Géminis son sinónimo de comunicación del Ser (SOL), llevado a este plano (LUNA). Sol en Géminis, bien expresado se relaciona con el “mensajero de los dioses”. Plutón representa múltiples energías, entre ellas el poder de lo que está oculto, también la sombra y la muerte... digamos que ha llegado el momento de revelar nuestras "sombras" personales y sociales.
Lo que toca Plutón, muere para nacer de nuevo, con otra “forma”, especialmente si es en un aspecto en tensión, como éste.
Para fluir con esta energía haríamos bien en poner nuestra voluntad en intentar ser conscientes de lo que hay escondido en nosotros y en los demás y más allá, con la finalidad de transcenderlo. Ése es el verdadero poder de Plutón: no hay otro camino a la luz que trascender la sombra, y, aunque aparentemente "sucio" y desagradable en principio, nada es más revelador y poderoso que hacer frente a nuestros propios miedos. Si lo hacemos, descubriremos que el único poder que los mantiene ahí somos nosotros mismos. Por sí, aquello a lo que tememos no tiene substancialidad, no es NADA.
Este aspecto está más reforzado aún: Saturno y Urano configuran una enorme CRUZ CÓSMICA, con PLUTÓN, La LUNA y el SOL...
Saturno y Plutón (el Padre del Karma y el dios de la Muerte) marcan etapas kármicas, por así decirlo (las palabras siempre son imprecisas, pero en alguna limitación debemos de caer si queremos expresarnos con ellas).
Digamos que son etapas que nuestro ser superior ha “planeado” con algún fin y que, por tal motivo, son especialmente significativas en algún aspecto. Pues bien, estos aspectos en tensión entre estos dos planetas marcan también, “curioso” las crisis económicas. En ellas los valores se “revisan”, como en la actual crisis que nos ocupa. Esta crisis económica trae consigo un significado más profundo: no ya el tema económico, sino el de verdad, causa de ésta: los valores de esta sociedad están desfasados, necesitan una urgente revisión y reprogramación desde sus mismos cimientos.
El aspecto Saturno-Plutón se está alejando. Este eclipse marca el comienzo de un final de etapa a este respecto. A partir de ahora la crisis se verá de “otra forma”… pero ¿cómo es posible si estamos sumergidos en ella de pleno? El cielo nos responderá, ya que, astrológicamente, la crisis comenzará a disminuir desde este eclipse y a partir de este otoño el aspecto se desconfigura…¿salimos de ella?
Urano unido a la configuración da un suceso repentino, sorpresas, verdades que no nos esperamos, que nos sobresaltan, inesperadas y evidentes, la VERDAD nos salta a la cara. En principio nos desestabiliza, pero es INNEGABLE…. Todo se “confabula” para que la verdad se muestre: La LUZ ES IMPARABLE.
Con estas energías, a poco que lo intentemos, lo "oculto", "la sombra", saldrá a la superficie. A algunos, pese a ellos mismos y ahí es donde puede producirse el mayor dolor, en la medida en que nos resistamos mentalmente a lo que deseamos inconscientemente, YA.
Para aquellos que sean afectados por este eclipse en algún planeta personal, los cambios serán radicales y poderosos también a nivel personal.
Venus, a principios de Géminis y en unión al nodo Sur, nos indica una reunión de antiguas energías de amor. Venus representa el amor, lo que consideramos valioso, la economía, en un plano material. Se van a dar conocimientos (Géminis) y nuevos encuentros de almas que están unidas por los lazos del amor en este mes y alrededor de esa fecha. Puede que volvamos a “valores” antiguos, quizá también económicos.
Esta energía se puede materializar en cualquier cosa que, para nosotros represente Venus y que merezca un cambio: puede ser un reencuentro con una antigua pareja, una antigua amistad, entre personas, entre colectividades.... También se puede dar en otro significado de “kármico”: no de esta vida.
Marte, en caída en Tauro nos avisa de que no es el momento de ser arriesgado. Todo viene tranquilo. Si bien, con el trino a Saturno (aspecto más armónico) nos dice que viene despacio (Tauro), pero seguro (Saturno). Saturno densifica y trae a este plano las energías que están en Marte. También Marte en Tauro puede representar a las energías o el poder (Marte) del Amor (Tauro, cuyo regente es Venus) o de la Madre Tierra, (otro arquetipo de Tauro). En Tauro la energía se condensa, espera su momento, y va ganado fuerza con el tiempo.
Es el momento de grandes acontecimientos, pero, los que están por llegar se harán de forma muy pausada, revisando y comprobando que son "bien recibidos"...con cuidado y sopesando su “momento”. Eso no evitará sorpresas y acontecimientos repentinos puntuales por la energía uraniana.
Hermanos, con el eclipse del 16 de Junio, en que la Luna se dejó de percibir, y estos aspectos de los que estamos hablando ahora, se aproximan cambios que marcarán una reconfiguración nueva de nuestra realidad: La LUNA es el arquetipo de la forma, de esta Vida. Ella dejó de percibirse por un tiempo (impresionantemente largo) para aparecer ante nuestros ojos con una forma que no conocíamos… ¿hay mejor imagen para lo que viene?
María Ángeles García
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